El hallazgo, resultado de una nueva investigación de la mano de un científico de la ARC Centre of Excellence for Coral Reef Studies (CoECRS), tiene graves implicaciones tanto para la pesca como para la industria del turismo basada en los arrecifes.
El estudio del profesor Mark McCormick de CoECRS y de la Universidad James Cook ha descubierto que en la batalla por sobrevivir al grave blanqueamiento de los corales, los grandes pomacéntridos alejan a aquellos más pequeños del refugio coralino y recursos, exponiéndolos a depredadores.
‘Los pomacéntridos juveniles que viven en corales muertos o afectados por el blanqueamiento tienen cuatro veces más probabilidades de morir que aquellos que viven en corales sanos.
‘Sabíamos que los acontecimientos del blanqueamiento del coral estaba provocando un incremento en la mortandad de peces sin embargo, este es el primer estudio que revela el mecanismo del comportamiento que está conduciendo a esta mortalidad.
‘En los corales sanos, los pomacéntridos juveniles de todos los tamaños tienen la misma probabilidad de morir sin embargo, con el blanqueamiento de los corales, la tasa de mortalidad entre los juveniles es mucho más elevada.’
‘Los resultados sorprendieron pues se sabe que estos pomacéntridos emplean un amplio abanico de hábitats. Pueden vivir en corales muertos, escombros y corales vivos, de manera que no creímos que el blanqueamiento del coral podría tener estos efectos fatales. Esperábamos incluso impactos más evidentes en los peces que viven en asociación cercana con los corales vivos.’
‘Los científicos pronostican que el blanqueamiento del coral será cada vez más frecuente y severo a medida que las temperaturas del océano aumenten como resultado del calentamiento global. Puesto que los pomacéntridos son presas de muchos peces más grandes en la Gran Barrera de Coral, los cambios en el comportamiento podrían tener efectos de largo alcance.’
Un declive en el número de pequeños peces que viven en los arrecifes significa números más pequeños de peces depredadores y estos son los peces que normalmente capturamos, como la trucha del coral.
Con el fin de entender la causa del aumento de la mortalidad, el profesor McCormick colocó un pomacéntrido joven en corales muertos, blanqueados y sanos de la Gran Barrera de Coral.
Descubrió que el pez se mantenía más próximo al refugio que le conferían los corales vivos, mientras que en el caso de los corales muertos o afectados por el blanqueamiento los peces se movían por encima del coral haciéndolos más vulnerables a la depredación.
El estudio también reveló que el lugar donde los pomacéntrido asientan el final de su fase de larva desempeña un importante papel en su supervivencia. ‘Esperábamos que si el pez se asentaba en un coral muerto o blanqueado pronto se desplazaría a un coral más sano, pero no fue así. El pomacéntrido permanecía en el coral muerto aun cuando a tan sólo 40 cm. había uno sano. Por tanto, su elección inicial de hábitat es clave en la supervivencia futura.”
Agravando el problema está el hecho de que la mayoría de peces alcanzan el fin de su estado de larva durante los meses más calurosos del año, cuando el coral se hace particularmente vulnerable al blanqueamiento. Este momento significa que es probable que un gran número de peces juveniles se asienten en corales vivos que pueden acabar blanqueando. Según el profesor McCormick, el comportamiento distinto que muestran al blanqueamiento del coral significa que finalmente morirán todos.
‘Aquellos que consigan sobrevivir en hábitats degradados tendrán características en el cuerpo distintas de aquellos que sobrevivan en corales vivos. Los resultados sugieren que si la expansión del blanqueamiento tiene lugar, podremos esperar ver cambios en las características de juveniles, por ejemplo, puede que sea ventajoso para el asentamiento de peces más grandes. También puede alterar el equilibrio natural entre el número de peces que mueren siendo larvas y el número que muere cuando alcanzan el arrecife.
La única forma de reducir el efecto del blanqueamiento del coral en las comunidades es hacer que el sistema sea más resistente.
‘Si eliminamos el estrés que supone la pesca y contaminación provocadas directamente por las actividades humanas, el hábitat puede ser capaz de resistir mejor el estrés del incremento de la temperatura del agua y la comunidad puede que regrese con fuerza más rápidamente de un cambio medioambiental importante.’