El Departamento de Pesca de Chipre transmitía su preocupación por una cría de foca monje (Monachus monachus) que se ha separado de su madre y advertía que su vida corre peligro si no se rescata pronto.
Melina Marcou, del Departamento de Pesca de Chipre, dice que el pequeño mamífero ha sido visto en los últimos días frente a la costa sudeste de la isla. Marcou informa que las probabilidad de que sobreviva son pocas o ninguna si no es encontrada en las próximas 72 horas. Añade que solo se ha producido un nacimiento en Chipre desde 2011.
La cría tiene menos de ochos semanas de edad y debería estar con su madre en el lugar donde nació.
“Si la cría no consigue encontrar a su madre, acabará muriendo de hambre debido a la falta de leche materna,” decía el Departamento de Pesca en una declaración.
Según el Departamento, las focas de fócido miden unos 80 cm al nacer y pueden alcanzar los 2,4 metros en la etapa adulta. Las crías nacen cubiertas de un lanugo amarillento que van mudando gradualmente cuanto tienen entre 6 y 8 semanas.
“Del material fotográfico publicado, esta cría no ha llegado a cambiar el pelaje”, decía el departamento.
Aunque puede nadar, no puede alimentarse por su cuenta y aun depende de su madre ya que el periodo de lactancia durante al menos dos meses.
La mayoría de las crías nacen en cuevas aisladas. La mortalidad suele ser bastante elevada, especialmente entre octubre y noviembre debido a las tormentas frecuentes y el fuerte oleaje, que pueden inundar las cuevas.
El Departamento de Pesca siempre está vigilando nuevos avistamientos, cada uno de los cuales queda registrado en la base de datos del ministerio.
Se hace un llamamiento a la gente para que contacte inmediatamente con el Departamento de Pesca del Ministerio de Medio Ambiente de Chipre mmarcou@dfmr.moa.gov.cy en caso de que la vea en el mar o en la playa donde puede haber ido a descansar.
La foca monje del Mediterráneo es tal vez el pinípedo que está en mayor riesgo de extinción del planeta debido al carácter reducido de su población y ámbito de distribución.
Se sabe muy poco de su biología y distribución y abundancia históricas.
Sus amenazas principales son la matanza deliberada en aguas griegas, los aparejos pesqueros y el desarrollo turístico.
Se estima que su población en el Mediterráneo es de unos 600 individuos. La mitad de ellos vive en el área marina de Grecia, mientras que en Chipre se estima que quedan entre 7 y 10.
La foca monje es una especie protegida en Chipre desde 1971.