Por primera vez, expertos en fauna salvaje han observado a los leones marinos endémicos de las Islas Galápagos estableciendo colonias a más de 900 millas frente a las aguas costeras de Perú. Según los investigadores, en los últimos diez años las temperaturas del océano en aguas peruanas han aumentado en más de 11º F, convirtiéndolas en una pasarela perfecta para los leones marinos únicos a las remotas Galápagos. Esta situación inquieta a los expertos que señalan que a medida que el cambio climático siga templando las aguas en otras regiones, más animales podrían empezar a emigrar de las islas, hogar de una multitud de especies no halladas en ningún otro lugar de la Tierra.
Según la Organización de Investigación y Conservación de Animales Acuáticos y que monitoriza los animales, el rápido calentamiento de las aguas frente la costa de Piura, al norte de Perú, han alcanzado los 73,4º F (22,7º C), coincidiendo prácticamente con los 77º F (25º C) preferidos por los leones marinos de las Galápagos.
“Las Galápagos ayudaron a Charles Darwin a desarrollar su teoría de la evolución gracias a la biodiversidad única de las islas, sin embargo, 150 años después de su famosa visita para estudiar su fauna salvaje, los leones marinos se van de sus orillas.
El hecho de que más animales se puedan arriesgar más allá de la minúscula cadena de islas para establecer colonias podría tener consecuencias inciertas para la biodiversidad que tanto tiempo tardó en establecerse. (