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Estudio revela que las líneas eléctricas de Kauai matan al año 1.800 aves marinas en peligro

Un análisis científico estima que cada año mueren en Kauai 1.800 aves marinas por colisión con las líneas eléctricas.

La pardela de Newell y el petrel hawaiano – dos aves marinas protegidas por la Ley de Especies Amenazadas – son nocturnas y solo se acercan a la costa a sus colonias reproductoras por la noche. Esto las hace particularmente vulnerables a colisiones con las líneas eléctricas, que prácticamente son invisibles al anochecer.

El nuevo análisis prevé que todas las colonias de aves marinas en Kauai desaparecerán antes de 2050. Aunque las aves marinas se enfrentan a muchas amenazas, incluidas las especies invasoras (gatos salvajes, pequeñas mangostas asiáticas y ratas), la pérdida de hábitat y la atracción a las luces de las zonas urbanas por la noche, hasta ahora se desconocía la magnitud del peligro de las líneas eléctricas

“Sin cambios drásticos en estas líneas eléctricas e importantes recursos de conservación para reducir este daño, Kauai perderá a estas increíbles aves marinas para siempre,” decía Brett Hartl, de la organización sin ánimo de lucro Center for Biological Diversity. “Detener la muerte de tantas aves será un enorme desafío, y tanto el gobierno federal como estatal tienen que ayudar a la gente de Kauai a solucionar este problema.”

En 1992 el huracán Iniki azotó Kauai y derribó la mayoría de líneas eléctricas de la isla. Cuando se colocaron de nuevo, los cables fueron alineados verticalmente para ahorrar tiempo y dinero. Estos cables puestos verticalmente forman una valla invisible con las que chocan las aves marinas cuando vuelan a toda velocidad, matándolas al instante o hiriéndolas. A principios de este año, un informe científico documentó un descenso del 94 por ciento en la población de pardela de Newell entre 1993 y 2013.

Ahora la compañía eléctrica está tomando medidas para volver a alinear algunas de estas líneas y está experimentando con láseres para hacerlas visibles a las aves.

La pardela de Newell fue protegida como especie amenazada en 1975. Sus principales áreas de reproducción se encuentran en la isla de de Kauai, aunque pueden hallarse pequeñas poblaciones en Maui y la Gran Isla de Hawai.

El petrel hawaiano fue protegido como en peligro de extinción en 1967 y se sabe que se reproduce solo en las principales islas hawaianas de Kauai, Lanai, Maui y la Gran Isla. Esta ave, que raramente se ve, puede llegar volar hasta las aguas de Alaska y California.

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