El cetáceo más poco común del mundo podría desaparecer en menos de cuatro años a menos que el gobierno mexicano tome medidas que protejan a la vaquita de los enredos en las redes de enmalle desplegadas ilegalmente en su único refugio en el Golfo de California.
Quedan menos de 100 vaquitas en el mundo y funcionarios gubernamentales y conservacionistas estadounidenses piden a Mexico que combata a los tramalleros de camarón que operan en el refugio de 488 millas cuadradas creado para proteger a esta especie de 5 pies de largo parecida a la marsopa.
La vaquita también se está viendo diezmada por el comercio ilegal de una especie de pez conocida como totoaba, que abastece una demanda de vegiga natatoria en China.
“Nos estamos quedando sin tiempo,” decía en una entrevista Rebeca Lent, directoria ejecutiva de la Marine Mammal Commision, una agencia independiente estadounidense.
“El esfuerzo por parte del gobierno de Mexico no ha sido efectivo. Lo que necesitamos es un compromiso firme por parte de Mexico para detener las redes de enmalle. Y lo necesitamos ya.”
Los miembros huidizos y tímidos de la familia de la vaquita habitan las aguas costeras poco profundas y turbias del área del delta del Río Colorado del Golfo de California, donde la población está disminuyendo en hasta un 18 por ciento cada año.
“Sabemos que los cárteles de la droga están implicados en el comercio ilegal de vegigas natatorias, que dificulta especialmente el cumplimiento de la ley,” dice Andrew Read, profesor de biología marina en la Universidad de Duke.
En una carta reciente enviada al Presidente mexicano Enrique Pena Nieto, una coalición de 28 grupos para la conservación, incluidos la American Cetacean Society, Center for Biological Diversity y la International Fund of Animal Welfare, adviertieron que están buscando varias acciones para conseguir urgentemente las protecciones que impidan la que sería “la primera extinción de un cetáceo endémico en Norteamérica.”
Estas acciones incluyen presentar una demanda para que se cumpla la disposición de “captura accidental extranjera” del Acta de Protección de Mamíferos Marinos de Estados Unidos, que podría resultar en una prohibición de todas las importaciones de camarón en California del Sur y en cualquier lugar que no sea “vaquita save” y pedir a la Administración Obama que imponga sanciones comerciales a Mexico por no hacer cumplir adecuadamente una prohibición del comercio ilegal de totoaba.
Entretanto, los conservacionistas están monitorizando la situación con sondeos aéreos y un equipo internacional de científicos separado está siguiendo a la especie con 48 hidrófonos situados en el fondo del océano para recoger los “clicks” vocales de la vaquita.
Las fotografías aéreas tomadas la semana pasada revelaron que al menos 17 barcos con redes de enmalle estaban operando ilegalmente en el refugio de la vaquita.
Las autoridades mexicanas han pedido un nuevo “sondeo de abundancia de la vaquita”, que podría suponer un tiempo y dinero considerables hasta su finalización.
“No necesitamos otro estudio. Los mejores científicos del mundo ya han examinado los datos y han concluido que el descenso de la población se ha acelerado debido a la pesca de enmalle no regulada.”
“La vaquita,” añade, “podría extinguirse en 2018, solo seis décadas después de haber sido descubierta.”