La contínua caza furtiva podría destruir la población de dugongo de Nueva Caledonia, han advertido grupos conservacionistas.
La organización sin ánimo de lucro WWF pide medidas urgentes para detener la matanza de estos mamíferos, una población que se estima ha sido reducida a 800 individuos.
En una declaración, el WWF dice que los sondeos han revelado que mucha gente admite consumir ocasionalmente carne de dugongo, aunque está estrictamente prohibido.
Se dice que si la caza furtiva sigue imbatible, el mamífero marino podría llegar a desaparecer.
El dugongo es pariente del manatí y solo se halla en estado silvestre en aguas costeras poco profundas de los océanos Índico y Pacífico Occidental.