Ocean Sentry
(De thenational.ae) La mezcla de olor a pescado muerto con diesel era casi insoportable, pero aún así, no molestaba a la gente abarrotada del alrededor, mientras un tiburón colgado por la cola era pesado en cubierta.
La mitad de los intestinos del tiburón salían por su boca mientras los orgullosos pescadores y los niños se fotografiaban cerca de él. La banda sonora de la película ‘Mandíbulas’ de Steven Spielberg sonaba por el altavoz.
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Bienvenidos al 38 Torneo de Tiburón de Montauk Marine Basin, un evento de dos días de la última semana de Junio en el cual unos 80 barcos compiten por el primer premio de 280.000 dólares.
El pequeño pueblo de Montauk, en la punta este de Long Island, se ha convertido en sinónimo de caza de tiburón, pero a la vez, la ética del deporte ha hecho crecer la controversia.
La batalla dirige a los grupos de defensa de los animales a buscar un aumento en la protección de los tiburones en peligro, ante pescadores y gente local que argumentan depender de este deporte para subsistir.
En realidad, los pescadores capturan y matan tiburones más pequeños. Aunque estos tiburones más pequeños no sean clasificados en el torneo, la carne de especies tales como el marrajo común es muy valoradas así como las ‘historias de matar’ que generan.
Por ejemplo, el primer día del torneo, un barco llamado Tough Guy (Chico Duro) capturó un marrajo de 44 kg, muy por debajo de los 68 kg del peso mínimo recomendado. “Yo peso más que eso”, murmuraba uno de los científicos.
 
