Ocean Sentry
El cuerpo muerto de una ballena jorobada que entró en el Puerto de Valdez en Alaska retenido en el bulbo de proa de un buque petrolero, ha sido remolcado al mar. El miércoles, el petrolero contrató a un buque pesquero para arrastrar a la ballena fuera del puerto.
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El capitán del barco, Bernie Culbertson, explica que tiene en proyecto abandonar el cuerpo del animal muerto a unas 70 millas del sur de Valdez.
El petrolero, propiedad de la Exxon Mobil, entró en la terminal el lunes con el cuerpo muerto de una ballena jorobada en el bulbo de proa de su barco.
El portavoz del SeaRiver Kokiak, Ray Botto, dice que el petrolero puede haber sido la causa de la muerte de la ballena pero también es posible que ya estuviera muerta.
Las ballenas jorobadas son especies en peligro de extinción protegidas a nivel federal.
El Servicio de Pesquerías Marinas Nacionales está investigando.
(De google.com, Alaska)
 
