(De nantucketindependent.com) – Si tu presencia en la playa hace cambiar el comportamiento de una foca es que estás demasiado cerca de ella.
Este sabio consejo, de Edie Ray del Equipo de Mamíferos Embarrancados, debería guiarte cuando compartas la arena con las focas grises, que este verano parecen preferir más las playas que el agua.
Ray, quien la semana pasada trabajó con el equipo para liberar de una red de pesca a cuatro jóvenes focas, está intentando localizar a otra foca que encontró de igual manera enredada en una red. Cuando la gente se acerca, la foca se asusta y por tanto es complicado dar con ella. “